Esta polémica no es exclusiva del Border Collie.......se da en muchas razas de trabajo en las que la selección por la belleza y acercamiento al estandar de la raza contrasta con una selección más funcional y dirigida a un trabajo o deporte canino......
Entre los defensores de las líneas de belleza se esgrime que la búsqueda del estandar no tiene porqué estar reñido con la funcionalidad. Es más, el estandar se basa en la funcionalidad y, por lo tanto, es una meta deseable tanto desde un punto de vista armónico y estético como funcional.
Entre los defensores de las líneas de trabajo se esgrime que la funcionalidad ha de ser la base de la selección, quedando las cuestiones morfológicas y estéticas en un segundo plano.
No se puede decir que ambas corrientes convivan en armonía......pues ambas acusan a la contraria de estar contribuyendo a una degeneración de la raza. Los defensores de las líneas de belleza advierten sobre el peligro de etiquetar como "línea de trabajo" a perros que, simplemente, no cumplen con el estandar de la raza......sin, a su vez, mostrar especiales condiciones para determinado trabajo.
Los defensores de las lineas de trabajo acusan a los "esteticistas" de olvidar en la selección la función original de la raza.......y de criar sin tener en cuanta la funcionalidad de la raza.
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